Fallido sistema digital de contabilidad envió a la cárcel a miles de inocentes en Inglaterra

Fallido sistema digital de contabilidad envió a la cárcel a miles de inocentes en Inglaterra

Por Adán Salgado Andrade

En la actualidad, con tal de ahorrar en gastos, empresas y gobiernos emplean softwares destinados a sustituir a personas, los que además, supuestamente, trabajan mejor que éstas.

Pero muchas veces presentan fallas. Es el caso, por ejemplo, de los sistemas de reconocimiento facial, que se ha comprobado que en varias ocasiones han errado y enviado a la cárcel a gente inocente (ver: https://www.techopedia.com/when-ai-facial-recognition-identifies-you-for-a-crime-you-didnt-commit).

Y otras veces esos softwares fallan en que imputan acciones como fraudes a personas inocentes que en ningún momento obraron mal. Es el caso de la Oficina de Correos de Inglaterra, que entre 1999 y el 2015, a los pequeños concesionarios que operaban establecimientos que trabajaban para aquélla, les fueron imputados fraudes debido a que la contabilidad era llevada a cabo mediante un software que proporcionó la empresa tecnológica japonesa Fujitsu. El sistema empleado se llamaba Horizon IT y es un escándalo que no termina de aclararse, como muestra el artículo de The Guardian, titulado “¿De qué se trata el escándalo de la Oficina de Correos de Inglaterra y quiénes están involucrados?”, firmado por Peter Walker, quien agrega como subtítulo que “la persecución de miles de personas ha sido considerado como uno de los peores errores de la justicia en la historia inglesa” (ver: https://www.theguardian.com/uk-news/2024/jan/11/what-is-uk-post-office-horizon-it-scandal-about-who-involved).

Inicia Walker explicando que miles de operadores de pequeñas sucursales de la Oficina de Correos fueron acusados falsamente de fraude, lo que el mismo actual Primer Ministro Rishi Sunak ha calificado del “peor error de la justicia en Inglaterra”.

El problema comenzó cuando el mencionado sistema digital de contabilidad Horizon, comenzó a señalar faltantes, que la Oficina de Correos aceptó, sin investigar más a fondo, pues no podía poner en duda a un software tan caro y sofisticado. Prefirió culpar a operadores inocentes, que a echarle la culpa del embrollo a Fujitsu.

“El resultado fue que 3,500 operadores de establecimientos conectados a la Oficina de Correos fueron falsamente acusados y más de 900, juzgados, muchos de los cuales fueron encarcelados y arruinados. Algunos sufrieron problemas de salud, ostracismo local y hasta perdieron a sus familias. En algunos casos, se suicidaron”.

Vean las consecuencias que ocasionó un software de contabilidad mal hecho, que dio falsos resultados, vidas arruinadas, gente de reputación intachable que, de pronto, fue tratada como criminal. ¡Ah, pero es la ciega confianza en ese tipo de software! Ya está sucediendo así con la mal llamada Inteligencia Artificial (que no es otra cosa que un sistema de entrenamiento redundante), la cual se pensaba que sería una nueva gran herramienta para mejorar nuestras vidas, pero ya está siendo usada, por ejemplo, para dar falsos mensajes presidenciales. A Joe Biden, recientemente se le achacó una llamada (la voz fue robotizada, hecha con IA) que exhortaba a sus seguidores a no votar en New Hampshire, lo que fue aprovechado por republicanos para reforzar la figura del nefasto Donald Trump (ver: https://www.wired.com/story/biden-robocall-deepfake-danger/).

Como señalé, Walker aclara que los imputados eran como franquiciados de la Oficina de Correos, que manejaban cartas, paquetes, así como cuentas bancarias, pagos de servicios, transferencias de dinero y solicitudes de documentos. Por eso es que tenían acceso a dinero, con el que según Horizon “detectó” que se habían cometido fraudes. Pero esos “fraudes” sólo existieron en el software, no en la realidad, salvo en algunos casos. Dice Walker que “la Oficina de Correos, que tiene alrededor de 11,500 sucursales en Inglaterra, fue antes parte del Correo Real, pero fue dividida en el 2012, cuando el servicio postal fue privatizado”.

Esa ha sido la nefasta tendencia, de privatizarlo todo, por el supuesto de que funcionará mejor. En México, no ha sucedido así con muchas empresas que fueron privatizadas y que, tras demostrar que no funcionaron mejor, sino que hasta empeoraron y quebraron, han sido hechas públicas de nuevo. Es el caso de Mexicana de Aviación, que cuando fue privatizada, funcionó muy mal y llegó a la quiebra. La administración del presidente López Obrador la rescató y ya opera de nuevo, siendo administrada por el ejército (ver: https://es.wikipedia.org/wiki/Compa%C3%B1%C3%ADa_Mexicana_de_Aviaci%C3%B3n).

Por eso la privatizada Oficina de Coreos no podía aceptar que su imposición de contabilidad digital había fallado, pues era aceptar que o hubo corrupción o que su vigilancia sobre Horizon era inexistente.

Señala Walker que fue hasta el 2021, cuando comenzó una investigación pública sobre el escándalo, que destapó “una cultura de manejos secretos en la Oficina de Correos, en donde las víctimas se marginaban, no se les tomaba en cuenta y no se les creía”.

Una de tales víctimas fue Alan Bates, acusado de fraude por miles de libras en su sucursal. Y fue hasta que él inició una acción colectiva que cientos de víctimas se dieron cuenta de que no eran las únicas en ser falsamente culpadas. “La Oficina de Correos incluso contrató a contadores privados para que buscaran evidencias del fraude de Bates, pero cuando éstos encontraron pruebas de que, en efecto, era una falla del programa, fueron despedidos”.

Y a pesar de que la Oficina de Correos comenzó a ser investigada por el escándalo, no se hizo prontamente, lo que, dice Walker, pudo haber evitado que dicho escándalo se extendiera hasta la actualidad.

Como dije, pudo haberse tratado hasta de una acción concertada de la Oficina de Correos, con tal de salir indirectamente beneficiada de los supuestos faltantes que los inculpados tenían que cubrir, aunque no fueran reales. Al final, se trata de hacer buen dinero.

Fue hasta el 2019, que un grupo de franquiciados ganó su caso en la Corte Suprema que se comenzó a develar el escándalo, señalando cómo a miles se les había culpado injustamente y comenzaron a recibir compensaciones. Y en octubre del 2022, la Oficina de Correos comenzó a disculparse por lo que llamó “fallas históricas”.

“Pero el proceso ha sido lento y hasta diciembre del 2023, 142 apelaciones han sido resueltas de más de 900 personas acusadas”, señala Walker.

El escándalo hasta mereció ya una serie televisiva de cuatro capítulos, “El Señor Bates contra la Oficina Postal”, en la cual, Alan Bates, quien comenzó con las demandas por falsas acusaciones, es personificado por Toby Jones (ver: https://www.theguardian.com/tv-and-radio/2024/jan/01/mr-bates-vs-the-post-office-review-toby-jones-is-perfect-in-a-devastating-tale-of-a-national-scandal).

Y también, con tal de arreglar las cosas en estos tiempos electorales en Inglaterra, Sunak ha anunciado un plan sin precedentes para emitir una ley que busque compensar a todos los culpados, con una suma de hasta £600,000 libras o a la que sea fijada, “y eso espera concluirse en verano del 2024”.

Pero como Walker señala, “no es el fin de la historia, pues ya hasta la Oficina de Correos está bajo investigación criminal y algunos políticos señalan que Fujitsu tendría que pagar las compensaciones”.

Sería también lo justo, pues si el escándalo fue debido a “errores” de Fujitsu, debe de responsabilizarse también, independientemente de que la Oficina de Correos haya tenido que ver en el falso manejo de la información. En el sitio digital de Fujitsu, se lee, al respecto, que “el Grupo Fujitsu considera este problema con la mayor seriedad posible y ofrece sus más sinceras disculpas a todos los operadores postales y a sus familias. La investigación pública llevada a cabo en Inglaterra, para la cual nuestra subsidiaria en ese país está cooperando totalmente, está examinando los complejos eventos que han tenido lugar durante varios años y mostramos nuestra total disposición a cooperar. Basándonos en los resultados de la investigación, estaremos trabajando con el gobierno inglés para tomar las acciones apropiadas, incluyendo contribuciones a las compensaciones. El grupo Fujitsu espera una pronta resolución que asegure un buen resultado para las víctimas” (ver: https://www.fujitsu.com/global/about/resources/news/notices/2024/0118-01.html).

Nótese que dice la declaración “contribuciones a las compensaciones”, no que las asumirá por completo, con lo que se deslinda en parte de un problema que directamente ocasionó.

Paula Vennells, ex jefa ejecutiva de la Oficina de Correos, hasta regresó una mención honorífica que recibió en el 2019, pues también es investigada como parte del escándalo. Otras altas personalidades de la política, de esa oficina y hasta de Fujitsu, están siendo llamadas a testificar, para aclarar hasta el fondo esa “falla” de la justicia (ver: https://www.theguardian.com/uk-news/2024/jan/09/former-post-office-boss-paula-vennells-to-return-cbe-amid-horizon-scandal).

Y, como siempre, los políticos, Liberales y Conservadores, se culpan unos a otros por el escándalo, que mandó a cientos de inocentes a la cárcel.

Todo por pensar que digitalizar la contabilidad iba a garantizar un mejor funcionamiento de los operadores, además de “ahorrar” en costos.

No fue así y al final, les saldrá más caro, por tantas compensaciones.

Y cientos todavía están en la cárcel, acusados injustamente por un fallido programa.

Parecería un capítulo de alguna serie de ciencia-ficción, en donde máquinas juzgan a personas (de hecho, hay programas en Estados Unidos que usando la Inteligencia Artificial, deciden si padres de familia son “aptos” o no, para cuidar a sus hijos. Ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2023/03/en-eeuu-se-usa-algoritmo-para.html).

Así que esa es la “eficiencia” que se logra con automatizarlo todo. Se sustituyen el sentido común y la experiencia humanas por 0’s y 1’s que se “equivocan” y hasta envían a la cárcel a inocentes.

¡Nefasto!

Contacto: studillac@hotmail.com