Uruguay - El sindicato como botín
Un verdadero calvario. El que sufren
las capas sociales más emprobrecidas. En los Hospitales Públicos se atienden
más de 1.200.000 personas y allí no hay derecho al reclamo. Los usuarios y sus
familiares padecen el destrato de un entramado perverso y cómplice. Autoridades,
médicos y funcionarios, defienden sus propios estatus. Las consecuencias
son devastadoras: la atención es deficiente, faltan camas, camillas,
medicamentos. Las esperas para una consulta con especialista llevan meses. En
el Hospital Maciel (que atiende a la mayoría de los usuarios del sistema) hay
una sola endocrinóloga que ya no acepta nuevos pacientes; en la policlínica de
salud mental del mismo hospital el único baño está en “en reparación”…desde
hace cuatro años. La mugre se amontona en cocinas, corredores y depósitos. En
las “colonias psiquiátricas” se vive un infierno: los “suicidios” se reiteran.
Y jaurías de perros salvajes llegaron a lanzarse contra internados. La
“solución” que ofrece el Ministerio de Salud Pública es cerrarlos y repartir a
los internados en otros establecimientos del sistema.
Es la cara espantosa de la “reforma
de la salud” que, bajo el ostentoso título de Sistema Nacional Integrado de
Salud (SNIS,) fue implementada durante el primer gobierno de Tabaré Vázquez
(2005-2010). Uno de sus diseñadores, Daniel Olesker (Partido Socialista, ex
ministro de Desarrollo Social y hoy “asesor” del PIT-CNT), la calificó de
“reforma protosocialista”.
En este cuadro de evidente “omisión
de asistencia” -lo que de por sí representa un delito-, hace su negocio la
Federación de Funcionarios de Salud Pública (FFSP), una corporación sindical
que se favorece del clientelismo político progresista, las prebendas económicas
y la ausencia total de controles administrativos y profesionales. Las
principales víctimas son los usuarios más pobres, esa “población vulnerable”
según la califican los sociólogos. A la cúpula de la FFSP poco le importa. Está
enfocada en algo más inmediato y sustancioso: roba el dinero de sus propios
afiliados.
La auditoría – cuyos conclusiones a
continuación reproducimos- fue realizada por el Instituto Cuesta Duarte (think
tank del Pit-Cnt) y publicada por el diario El País. Seguramente, el mismo
Instituto se lo filtró al “órgano de la oligarquía”. Podría resultar curioso
que desde el propio aparato sindical se ponga en evidencia la descomposición de
la burocracia. Pero no hay nada de curioso ni de casual. Se trata de lavar la
imagen de lo que llaman “un solo movimiento sindical”. El momento lo exige:
pese a tener una “afiliación histórica”, el Pit-CNT cada vez cuenta con menos
aprobación en la sociedad y con menos adhesiones en las movilizaciones y “paros
generales parciales” que realiza. Por otra parte, la audotoría sobre la
corrupción en la FFSP viene a “compensar” el archivo o cierre de otras
gravísimas denuncias. Cómo ocurrió en el caso del programa de construcción de
la “vivienda sindical”, donde dirigentes metalúrgicos del Partido Comunista
operaron para traficar influencias cobrando coimas; o cómo pasó con la
“comisión investigadora” encargada de pronunciarse respecto a la conducta del
ex vicepresidente del Pit-Cnt, Joselo López, jefe de una banda mafiosa que
recibía beneficios gubernamentales a cambio de garantizar el objetivo de “cero
fugas”, reprimiendo y torturando a los “jóvenes infractores” encarcelados en el
Sistema de Responsabilidad Penal Adolescente. (Redacción de Correspondencia de
Prensa)
Falta más de la mitad de los
comprobantes, según auditoría del Pit-Cnt
Gremio de la salud: faltante de
boletas y gastos excesivos
Documentación "irregular" e
"inverificable". Faltante de recibos. Cuantiosos préstamos a líderes
gremiales de los cuales no se puede determinar su devolución. Gastos excesivos
en viajes. Y giros de dinero al expresidente del sindicato, Alfredo Silva
cuando este ya era director de la Administración de Servicios de Salud del
Estado (ASSE).
Carlos Tapia
El País, Montevideo, 1-11-2015
Estas son algunas de las
irregularidades constatadas en la contabilidad de la Federación de Funcionarios
de Salud Pública (FFSP), y que fueron enumeradas junto a los respectivos
comprobantes, en una auditoría diseñada por el Instituto Cuesta Duarte del
Pit-Cnt, a la que accedió El País.
Sobre la Colonia de Vacaciones —de la
cual un documento preliminar de la auditoría interna del sindicato advertía,
según reveló El País en marzo pasado, la pérdida de 10 millones de pesos debido
a diversas irregularidades—, el informe analizó un total de 3.382.233 pesos
correspondientes a egresos que van desde enero a diciembre de 2013. De este
dinero se señala que el 46% está justificado con documentos correctos, 32% no
cuenta con ninguna documentación que justifique el gasto, 19% se justifica con
documentos irregulares y 3% con documentos inverificables.
Préstamos y viajes
Otro capítulo de la auditoría da
cuenta de los préstamos que pedían algunos miembros de la Federación, sobre
todo jerarcas sindicales, y de los cuales "la carencia de información
veraz" hizo imposible "determinar la devolución total o parcial"
del dinero solicitado. Quien más plata pidió en el lapso que va del año 2011 al
2014, fue el exdirector de ASSE y expresidente del gremio, Alfredo Silva. Según
consta en la documentación, se le entregaron en calidad de préstamo $ 130.000.
Como consecuencia de su gestión en ASSE, Silva fue procesado en el marco de una
maniobra de sobrefacturaciones con una empresa que se encargaba de la limpieza
del Maciel.
En segundo lugar está la también
expresidenta del sindicato, Beatriz Fajián (1), con un préstamo de 125.000
pesos.
Y tercero Heber "Toshiba"
Tejeira, dirigente procesado (con prisión) e involucrado en el caso Silva, con
109.000 pesos.
Además, se señala que el actual
presidente del gremio, Pablo Cabrera (2) pidió un monto de 45.000 pesos a su
nombre, aunque un documento interno advertía que este dinero fue en realidad
otorgado a Silva (incluso el trabajo del Instituto Cuesta Duarte adjunta la
fotocopia de una boleta en la que se prueba que el dinero fue para él).
El informe también devela que los
principales dirigentes de la Federación compraron computadoras y celulares, y
que su costo fue descontado sobre las cuotas semanales que reciben los
sindicalistas por gastos de representación.
"No se cuenta con documentación
que respalde estos gastos", señala en tanto el informe sobre las grandes
cifras de dinero que los sindicalistas gastaron en viajes. Desde 2011 a 2014
los dirigentes de la Federación gastaron 4.252.946 pesos en viajes. La que más
gastos generó fue Fajián, con un monto de 1.573.255 pesos —solo en 2013 retiró
por este concepto un total de 601.717 pesos—.
El informe también señala que quienes
viajaron no reintegraron el dinero que cobran por gastos de representación, en
el entendido de que si estaban moviéndose con viáticos durante los viajes no
necesitaban también este dinero.
Supermercado
Luego, sobre las compras que
corresponden al período que va desde diciembre de 2010 a mayo de 2015 en el
proveedor Polakof y Cia. S.A., razón social de los supermercados El Dorado, se
dice que "no se cuenta con boletas de compra contado o facturas y recibos
de este proveedor" y que "por tanto no se pueden determinar los
bienes adquiridos, su efectiva recepción, ni su destino".
El informe sostiene que en el período
de estos cinco años "se observa un saldo negativo de 115.039 pesos
compuesto por débito de 4.336.778 y créditos de 4.221.783".
El Cuesta Duarte consultó al contador
de la FFSP, Carlos Rocumpaj, sobre la forma de trabajo con este proveedor, y
manifestó que "se libraban cheques para futuras compras, sin establecerse
a qué artículos podían corresponder. Posteriormente, integrantes de la FFSP
concurrían al local a retirar la mercadería ya pagada con los cheques diferidos
antes mencionados. Asimismo, podía suceder que se le indicaba a este proveedor
a qué dirección debía enviar la mercadería".
Pagaban a Silva siendo director de
ASSE
Alfredo Silva (3) asumió como
representante de los trabajadores en ASSE en 2008 y se mantuvo en el cargo
hasta 2014. Durante este tiempo estuvo en los dos lados del mostrador, pues al
mismo tiempo ostentaba el liderazgo de la Federación de Funcionarios de Salud
Pública (FFSP).
Como director de ASSE, Silva ganaba
unos 100.000 pesos y contaba con otros beneficios como auto con chofer, dos
adjuntos y dos asistentes a su disposición. Sin embargo, según la auditoría que
el Instituto Cuesta Duarte hizo en la FFSP, Silva siguió cobrando los gastos de
representación como sindicalista. La plata era depositada cada semana en una
cuenta.
Notas de Correspondencia de Prensa
1) ) Integra el Movimiento de
Participación Popular (MPP), grupo político de José Mujica y los tupamaros en
el Frente Amplio. Fue parte del Secretariado del PIT-CNT.
2) Dirigente del Partido Socialista
de los Trabajadores (PST). Se postulaba a ocupar el cargo de Silva en ASSE,
pero el gobierno no lo quiere allí.
3) Fue miembro y candidato electoral
del PST. Está procesado (sin prisión) por tráfico de influencias y por utilizar
su cargo jerárquico en favor de una “cooperativa” (empresa tercerizada) en el
área de los servicios de limpieza en el Hospital Maciel. Se le abrió un sumario
administrativo y cobra un tercio del salario.
0 Responses to "Uruguay - El sindicato como botín"
Publicar un comentario