Chile - No a la AFP Estatal

Posted by Correo Semanal on martes, septiembre 30, 2014

Patricio Guzmán S.
Socialismo Revolucionario


El sistema de Asociaciones de Fondos de Pensiones (AFP) es un pilar del modelo de acumulación de capital, en favor de los bancos y grandes grupos económicos de Chile. Está diseñado para convertir el ahorro forzoso de los trabajadores en capital, mediante su inversión en los mercados de capitales.
En si mismas las AFP han operado como un lucrativo negocio, sin embargo, el centro de la cuestión no es la propiedad misma de las AFP, sino su calidad de intermediario financiero para concentrar ahorro y ponerlo a operar como capital. El problema no es la propiedad de las AFP, sino el sistema de capitalización individual.

El proyecto de ley para crear una AFP estatal, está en el congreso.  La ministra del Trabajo, Javiera Blanco justificó la iniciativa señalando: "Una AFP Estatal nos va a permitir general confianza en el mercado, en entregar el legitimo derecho a optar entre lo público y lo privado, y además hacernos cargo de ciertos sectores de potenciales afiliados que hoy no lo están y queremos generar el acompañamiento para que se puedan sumar." (Estrategia, lunes 29 de septiembre de 2014. Cómo competirá el estado en el Negocio Previsional.)

El centro del asunto es legitimar un sistema crecientemente desacreditado.
Se han escuchado cuatro argumentos para defender la necesidad de una AFP Estatal:
1.- El sistema está desacreditado, la AFP estatal le dará nueva confianza.
2.- Aumentará la competencia.
3.- Reducirá las comisiones.
4.- Aumentará la cobertura.

Vamos a contestar brevemente  estos argumentos.

La AFP Estatal debe jugar con las mismas reglar que las privadas, de otra manera sería considerado competencia desleal, y por tanto inconstitucional.
No hay razones para pensar que las pensiones mejorarán con una AFP Estatal. Las pensiones no van a mejorar, de hecho cuando Bachelet anunció la presentación del proyecto, reconoció que las pensiones no mejorarían. 

El sistema ha fracasado en dar buenas pensiones, eso es lo que lo tiene desacreditado. El intento del gobierno por reacreditarlo tendrá corta vida. El malestar de la gente aumentará a medida que jubilen más pensiones. No hay ninguna posibilidad de tasas de reemplazo cercanas al 70%.
En el futuro las pensiones empeoraran.  La tendencia de la rentabilidad hacia adelante es que seguirá disminuyendo. como muchos expertos han reconocido, incluso Solange Berstein, ex superintendente de previsión.

Las AFP tienen razón, en parte, al indicar que el problema radica en las malas condiciones laborales, de estabilidad y bajos salarios del mercado laboral chileno.  Pero este es un argumento demoledor en contra del propio sistema de AFP, pues no se ve posibilidad de un cambio estructural del mercado laboral en el medio plazo. Un sistema de reparto simple, solidario y de financiamiento tripartito sería mucho más adecuado para el mercado laboral que tenemos.

 
Las comisiones ya son bastante bajas. El 0.47% de PlanVital, no es fácil de superar sin una masa crítica importante de cotizantes, e incluso de hacerlo la nueva AFP estatal, no tendría un impacto importante para el bolsillo del trabajador, pero más importante la nueva AFP tendrá que esperar a ganar una licitación por un periodo de dos años, cuando termine el actual, ganado por AFP PlanVital. Mientras tanto tiene que captar cotizantes con antigüedad superior a dos años.
           
            El aumento de competencia nos parece que no será importante, por la entrada de un séptimo actor al mercado de AFP. En el pasado existieron decenas de AFP. El problema central no es la falta de competencia, sino la lógica de capitalización individual, y la acumulación de capital en los mercados especulativos, que finalmente lleva el ahorro a los grandes bancos y grupos económicos.

      El estado tendrá que hacerse cargo de cuantiosos costos en todo el proceso de entrada al mercado de la AFP Estatal, no hay ninguna seguridad en que capturará rápidamente una masa crítica de afiliados cotizantes para asegurar los costos. Creemos que sería mejor destinar este dinero a mejorar el llamado pilar solidario.        
      No existe razón para afirmar, que con la nueva AFP estatal, habrá una diferencia en la cobertura. Los trabajadores que están fuera del sistema, no acceden por su precariedad.

En resumen: El gobierno parece querer ganar tiempo, intentar legitimar el sistema de AFP, al menos por algunos años, con la figura de una AFP Estatal.  Pero las pésimas pensiones seguirán desacreditando al sistema de AFP, y estimulando la lucha por recuperar la Seguridad Social.