Chile - Sobre el término de la movilización portuaria. Una batalla ganada.
por Unión Porturaia del Bio-bio /fuente: El chancho 'e goma.
El pasado 15 de marzo de 2013 quedará marcado en la historia de Chile, ya que fue el comienzo de la movilización nacional más larga y masiva de los últimos 40 años en el sector portuario. Este movimiento además se caracteriza y se diferencia de otros, porque su objetivo final no era de índole económico, sino de respeto y dignidad.
El pasado 15 de marzo de 2013 quedará marcado en la historia de Chile, ya que fue el comienzo de la movilización nacional más larga y masiva de los últimos 40 años en el sector portuario. Este movimiento además se caracteriza y se diferencia de otros, porque su objetivo final no era de índole económico, sino de respeto y dignidad.
El movimiento comienza en el puerto de Angamos, Mejillones, los trabajadores hacen efectivo su derecho legal de hacer colación, a lo que la empresa responde con la violencia policial que está a su servicio, sanciones y despidos, para los trabajadores que osaron levantar la voz. Ante la negativa y prepotente respuesta de la empresa ULTRAPORT, los trabajadores inician la paralización de sus faenas, tomándose la entrada al recinto para forzar una negociación con la empresa. De acuerdo a lo planificado en el encuentro nacional, realizado en enero del 2013 en Concepción, los conflictos tienen que ser resueltos a nivel local, y si esto no se logra, tienen que intervenir los vecinos inmediatos, hasta llegar a sumar a todo el país. En esta paralización se dio esta lógica, desde el día 15 de marzo y a poco andar, se sumaron Antofagasta e Iquique, luego Huasco , Chañaral y Caldera, cuando este conflicto llevaba poco más de una semana, se suma el puerto de san Antonio y al día siguiente, el 27 de marzo se suma a este apoyo la Unión Portuaria del Bío Bío y Unión Portuaria del Sur. Con esto el 70% de los puertos del país se encuentran movilizados, sólo se restan los puertos que están afiliados a la Contraporchi , estos son Arica, Coquimbo y Valparaíso. ¿Por qué se llegó a esta movilización tan masiva?, la respuesta está en la frustración e impotencia acumulada por años, producto de los abusos y prepotencia de la clase empresarial, y que hoy provocaron este gran estallido por el respeto y la dignidad. Durante este periodo nos dimos cuenta cómo mueven sus influencias los grandes grupos económicos, en este caso el grupo Von Appen, primero comenzaron utilizando la fuerza policial para reprimir a los compañeros en mejillones, producto de esto, resultaron muchos compañeros con lesiones, algunas de carácter grave, como es el caso del dirigente Enrique Solar, luego las amenazas del gobierno de aplicar la ley de seguridad interior del estado, las declaraciones solidarias de los demás empresarios, culpando a los trabajadores del desastre económico, por supuesto todo esto es apoyado por los canales de televisión que están al servicio de los grandes empresarios, y cómo no va a ser así, si ellos son los dueños de los medios de comunicación, en fin, esta lacra de las comunicaciones se encargaron de invisivilizar el conflicto.
En Chile los grupos económicos tienen asociaciones en las que se reúnen y planifican las formas de seguir exprimiendo las riquezas del país y a sus trabajadores, para ellos es normal hacer declaraciones de apoyo a sus proyectos, solidarizan entre sus pares cuando tienen dificultades, se coluden para manejar los precios de determinados productos y para lucrar “pasándose la ley por el traste”, pero ellos no entienden por qué trabajadores que están a más de 2.000 kilómetros de distancia, que no tienen nada que ver con los productos mineros, apoyan y se inmiscuyen en este conflicto. Claro, ellos sólo entienden hasta donde los dólares les permiten ver. Pero nosotros los trabajadores, los explotados, los postergados por este sistema político-económico, tenemos algo que ellos ni con todo el oro del mundo podrán comprar, esto se llama solidaridad de clase, esta solidaridad que nos ha hecho estar paralizados por más de 20 días en el caso de Mejillones, y 10 días en el Bío Bío, restándole importancia al daño económico que nuestra economía familiar pueda sufrir. Lo que importa es ir en ayuda de nuestros compañeros que estaban siendo pisoteados en su dignidad, por eso decimos que este paro no fue de carácter económico, sino que fue un paro por el respeto y la dignidad de los trabajadores, y ojo no tan sólo portuarios, sino de todos los trabajadores del país y del mundo, ya que explotados y oprimidos existen en todo los lugares donde existan empresarios que abusan de su poder.
Hoy para muchos es el comienzo de una nueva vida, como persona y como trabajador, esto tiene que ser así, muchos se sacaron esa mochila cargada de miedos y frustraciones, y hoy miran la vida con más optimismo, con esperanza en un futuro mejor para él, su familia y sus compañeros de trabajo.
Esta histórica lucha nos deja muchos triunfos, en el conflicto mismo se obtiene el reingreso de todos los compañeros desvinculados, el retiro de todas las cartas de amonestaciones y momentáneamente se valoriza en $3.600.- la media hora de colación, pero a nivel nacional reafirmamos el discurso y práctica de la importancia de la unidad de los trabajadores para enfrentar sus demandas. Hoy más trabajadores se han apartado de esos dirigentes rastreros, que negocian y juegan con los intereses de los trabajadores, en Mejillones se juntaron todos los sindicatos y negociaron unidos, en Valparaíso las bases sobrepasaron a sus dirigentes, y en una decisión histórica se tomaron el puerto, como vemos esas federaciones que aun sobreviven, gracias a esta clase de dirigentes, apoyados por los empresarios y la clase política, están en el ocaso de su existencia.
Muchos desafíos quedan en nuestro sector portuario y a nivel nacional, pero sabemos que hoy tenemos la razón y la fuerza de la unidad, a los empresarios les queda claro que ya no pueden seguir con estas prácticas anti sindicales y de abuso hacia la clase trabajadora, y a la clase política les decimos que vamos a estar vigilando sus acciones, para que no sigan perjudicando a los trabajadores.
En Chile los grupos económicos tienen asociaciones en las que se reúnen y planifican las formas de seguir exprimiendo las riquezas del país y a sus trabajadores, para ellos es normal hacer declaraciones de apoyo a sus proyectos, solidarizan entre sus pares cuando tienen dificultades, se coluden para manejar los precios de determinados productos y para lucrar “pasándose la ley por el traste”, pero ellos no entienden por qué trabajadores que están a más de 2.000 kilómetros de distancia, que no tienen nada que ver con los productos mineros, apoyan y se inmiscuyen en este conflicto. Claro, ellos sólo entienden hasta donde los dólares les permiten ver. Pero nosotros los trabajadores, los explotados, los postergados por este sistema político-económico, tenemos algo que ellos ni con todo el oro del mundo podrán comprar, esto se llama solidaridad de clase, esta solidaridad que nos ha hecho estar paralizados por más de 20 días en el caso de Mejillones, y 10 días en el Bío Bío, restándole importancia al daño económico que nuestra economía familiar pueda sufrir. Lo que importa es ir en ayuda de nuestros compañeros que estaban siendo pisoteados en su dignidad, por eso decimos que este paro no fue de carácter económico, sino que fue un paro por el respeto y la dignidad de los trabajadores, y ojo no tan sólo portuarios, sino de todos los trabajadores del país y del mundo, ya que explotados y oprimidos existen en todo los lugares donde existan empresarios que abusan de su poder.
Hoy para muchos es el comienzo de una nueva vida, como persona y como trabajador, esto tiene que ser así, muchos se sacaron esa mochila cargada de miedos y frustraciones, y hoy miran la vida con más optimismo, con esperanza en un futuro mejor para él, su familia y sus compañeros de trabajo.
Esta histórica lucha nos deja muchos triunfos, en el conflicto mismo se obtiene el reingreso de todos los compañeros desvinculados, el retiro de todas las cartas de amonestaciones y momentáneamente se valoriza en $3.600.- la media hora de colación, pero a nivel nacional reafirmamos el discurso y práctica de la importancia de la unidad de los trabajadores para enfrentar sus demandas. Hoy más trabajadores se han apartado de esos dirigentes rastreros, que negocian y juegan con los intereses de los trabajadores, en Mejillones se juntaron todos los sindicatos y negociaron unidos, en Valparaíso las bases sobrepasaron a sus dirigentes, y en una decisión histórica se tomaron el puerto, como vemos esas federaciones que aun sobreviven, gracias a esta clase de dirigentes, apoyados por los empresarios y la clase política, están en el ocaso de su existencia.
Muchos desafíos quedan en nuestro sector portuario y a nivel nacional, pero sabemos que hoy tenemos la razón y la fuerza de la unidad, a los empresarios les queda claro que ya no pueden seguir con estas prácticas anti sindicales y de abuso hacia la clase trabajadora, y a la clase política les decimos que vamos a estar vigilando sus acciones, para que no sigan perjudicando a los trabajadores.
Los trabajadores somos importantes en la economía del país, ya que nosotros con nuestro esfuerzo somos los que generamos la riqueza, nuestro afán nunca será desestabilizar la economía del país, nuestras demandas van más allá de intereses políticos partidistas como pretenden hacer creer a la opinión pública algunos empresarios, nuestro fin es simple y claro, merecemos respeto y condiciones de trabajo dignas, y mientras esas condiciones estén, aportaremos felices al crecimiento de nuestra patria, pero no dudaremos en volver a alzar la voz cuando nuestros legítimos derechos pretendan ser atropellados.
Agradecemos a todos los que hicieron posible este triunfo histórico, a los trabajadores y a sus familias, a los dirigentes y sus familias, a los medios de comunicación alternativos, que con pocos recursos se encargaron de difundir esta lucha, a los trabajadores y estudiantes que estuvieron prestando apoyo solidario.
EXTRA DE ÚLTIMO MINUTO
Siendo las 14 hrs del 6 de abril se nos informa que San Antonio y Valparaíso siguen movilizados.
La Unión Portuaria de Chile se mantiene en estado de alerta a posibles movilizaciones.
Unidad, lucha y solidaridad…
Unión Portuaria del Bío Bío.
Talcahuano, 6 de abril del 2013
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