La Izquierda Popular y las elecciones municipales.
La izquierda Popular en la elecciones municipales
Hace unos meses, el 21 de mayo, un grupo integrado por siete estudiantes de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES) irrumpió en el desfile de las glorias navales con un cartel que decía, “ni traidores ni municipales, funemos las municipales”. Cuatro días más tarde, su vocera, Eloísa González, explicaba los alcances de su convocatoria expresando, "como todo va a estar enfocado en las comunas, nuestra demanda de desmunicipalización va a pasar a segundo plano si no sabemos gestionarla y la gente va a quedar con la sensación que con el voto se resuelve mucho” (1). Los dichos de la vocera generaron amplia repercusión, no sólo por el respeto que la ACES se ha ganado sino también porque devela una vieja polémica que se venía gestando al interior de la izquierda, y que tiene que ver con las formas de construir izquierda hoy día. La polémica está centrada en dos consensos y una disensión, se concuerda en que el modelo está en crisis y que esta se debe dirimir mediante una Asamblea Constituyente, pero se difiere en la forma para llegar a esa Asamblea.
Desde abril del Pte. año, Manuel Cabieses, desde la trinchera de Punto Final ha llamado a abstenerse a votar en las próximas elecciones municipales. Según el editorialista, existe hoy "la posibilidad de convertir las elecciones municipales en un acto de rechazo ciudadano al sistema político" (2), para Cabieses el problema no está en rechazar lo electoral a priori, sino el hecho de que el movimiento social no ha alcanzado la madurez para expresarse políticamente todavía. Es de este movimiento social producto de un arduo trabajo, surgirá la "alternativa en cuyo seno pueda recrearse el partido del socialismo hoy ausente de la escena política" (3). Cabieses reconoce que, "se han hecho varios esfuerzos -sin duda a destiempo e insuficientes-, no se ha logrado crear en Chile el instrumento político que, actuando desde el movimiento social, levante una alternativa política" (4); puntualizando más adelante, " se eligió el camino fácil pero equivocado de buscar la legalización e intentar la captura de una cuota de votos que permitiera participar en la desprestigiada institucionalidad" (5), lo que dejaría como único camino la abstención en las próximas elecciones.
En la otra vereda estamos aquellos que, insertos en el movimiento social, hemos decididos asumir la tarea, desde la izquierda, de dotar al país de una propuesta política que permita salir al encuentro del modelo neoliberal en sus versiones de derecha y centro hoy existentes. En efecto, hace algunos meses concordamos un acuerdo electoral con el Partido Igualdad en formación, y en conjunto hicimos entrega en el SERVEL de las firmas que permitirán inscribir al Partido Igualdad en las Regiones Metropolitana, V y IV. El Partido Igualdad ya es legal en tres regiones del norte.
Este acuerdo lo consideramos como un instrumento que permita acumular fuerza social en pro de terminar con el neoliberalismo imperante y articular la primera Asamblea Constituyente de carácter popular debidamente democrática de la historia de Chile. Vemos con preocupación cómo, sectores que han apoyado el modelo político económico hoy se arrogan la representatividad de la izquierda, situación agravada aún más con el pacto del PC con la Concertación. Lo decimos derechamente y con orgullo, somos de izquierda, combatimos la dictadura, jamás llamamos a votar por la concertación bajo ningún pretexto. Oh, acaso no tiene derecho la izquierda a levantar su propio discurso. No avanzamos en este proceso para ser un obstáculo al movimiento social, por el contrario, un partido de izquierda debe estar al servicio y además ser una caja de resonancia del movimiento social.
Por último, llamar a la abstención hoy en día es un acto de profunda irresponsabilidad en un país donde queremos que el pueblo se politice, pero, además, es un acto facilista ya que está demostrado que los sistemas electorales con inscripción automática y voto voluntario tienden a elitizar aún más el patrón electoral. Es más, mientras menos participe el pueblo en la cosa pública se corre el riesgo del nacimiento del caudillismo populista que, con soluciones mediáticas pretenden hacer cambios de fondo, cosa que Cabieses conoce ya que es un gran lector de la historia de Chile.
Izquierda Popular
Julio del 2012.
Notas.
1.- Vocera de la Aces critica a ex dirigentes que hoy son candidatos: “es darle la espalda al movimiento estudiantil. El Dínamo, 24 de mayo de 2012. Ver en: http://www.eldinamo.cl/2012/ 05/24/vocera-de-la-aces- critica-a-ex-dirigentes-que- hoy-son-candidatos-es-darle- la-espalda-al-movimiento- estudiantil/
2.- "Chile entre dos derechas: Votar o no votar, esa es la cuestión"; Editorial, Manuel Cabieses. En Revista Punto Final, n° 755, abril de 2012.
3.- "El cambio político"; Editorial, Manuel Cabieses. En Revista Punto Final, n° 753, marzo de 2012.
4.- "La república de latón y la abstención activa "; Editorial, Manuel Cabieses. En Revista Punto Final, n° 759, junio de 2012.
5.- Ibíd.
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