LA PESADILLA SIN FIN DEL OPERATIVO CÓNDOR

Posted by Correo Semanal on viernes, junio 20, 2008

Luís Agüero Wagner
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La embajada norteamericana de Asunción constituyó por mucho tiempo el Centro de Operaciones de la CIA en Sudamérica, desde que en octubre de 1956 fueron asignados en Washington los especialistas para organizar la represión en Paraguay, en una reunión en la que apareció uno de los principales dirigentes que apoyaron al obispo Fernando Lugo, el doctor Oscar Ynsfrán. El profesor de la Universidad de long Island, Patrice McSherry, descubrió hace pocos años un cable enviado en 1978 al secretario de estado Cyrus Vance por el embajador en Paraguay Robert White, donde éste confiesa que los gobiernos que participaban del Operativo Cóndor mantenían contacto entre sí a través de un predio de comunicaciones norteamericano en la zona del canal de Panamá. La unidad era un observatorio desde el cual el imperio monitoreaba de cerca el terrorismo de estado que asolaba el Cono Sur.
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A pesar del tiempo transcurrido y de los supuestos avances "progresistas" en la región, la pesadilla sufragada desde Washington en Paraguay no parece tener solución de continuidad, y el hostigamiento sigue siendo cotidiano incluso para renombradas víctimas del Operativo Cóndor como el luchador por los derechos humanos de fama internacional Martín Almada. En la mañana de ayer jueves 19 de junio a las 9.oo hs. el Fiscal de Delito Económico Martín Cabrera, fijó audiencia para que el Dr.Hiran Delgado Von Leppel se ratifique o no en su denuncia contra el Dr. Martín Almada, a quien atribuye en burla poseer titulo falso de PREMIO NOBEL ALTERNATIVO DE LA PAZ y de MIEMBRO DEL COMITÉ EJECUTIVO DE LA ASOCIACION AMERICANA DE JURISTAS.
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El Dr. Delgado Von Leppel fue el Presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Dictadura de Stroessner y el año pasado promovió una querella criminal contra el Defensor de los Derechos Humanos ,Martin Almada, porque este le exigió "justificar el origen de su cuantiosa fortuna".Cabe destacar además que Almada esta siendo querellado por el Dr. Juan Manuel Morales, Vicepresidente de la Justicia Electoral por haber denunciado a Morales de "informante" (pyrague) de Pastor Coronel. Durante la audiencia de conciliación ante el Juez Ferro Almada manifestó que por haber sufrido síndrome de estrés post traumático como consecuencia de las torturas, lo cual le produjo profundas huellas psíquicas. Almada, responsable del hallazgo del ARCHIVO DEL TERROR o de la OPERACIÓN CONDOR, es constantemente hostigado así por antiguos funcionarios del régimen neo nazi y pro-Washington del general Alfredo Stroessner. Otro de sus denunciados fue el Escribano Juan José Benitez Rickman, quien allanó "manu militari" la Biblioteca de la Universidad Católica llevándose los libros supuestamente subversivos. Por ese motivo el ex vocero de la dictadura le querelló criminalmente exigiendo el pago de 100.000 dólares, por sentirse herido en su fina susceptibilidad de represor. De esta manera, de ser perseguido por el ejército y la policía, Almada pasó a ser perseguido por un caduco aparato judicial inquisitorial, rémora de un funesto pasado. Maestros del camaleonismo político, muchos de estos represores vinculados a Stroessner lograron mimetizarse en el entorno del clérigo-presidente Fernando Lugo, cuya candidatura apoyaron financiera y electoralmente.
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Aunque muchos progresistas cifraron grandes esperanzas en el obispo Fernando Lugo, recientemente electo presidente, estos compromisos y actitudes no anuncian grandes cambios en concreto. En su reciente vista a Venezuela el clérigo mantuvo contactos con los más acérrimos críticos al gobierno de Hugo Chávez, entre ellos el arzobispo de Mérida Mons. Baltasar Porras. La campaña de Lugo fue fuertemente apoyada por la prensa antichavista dominada en Paraguay por jerarcas de la SIP, y por una constelación de movimientos financiados por el embajador norteamericano James Cason a través de USAID y otros organismos de coacción imperialista.
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Su gabinete de ministros está constituído en su totalidad por partidarios del neoliberalismo promocionados por la embajada norteamericana, y el Congreso que le acompañará está dominado por neo fascistas y reaccionarios, a pesar del "gran triunfo de la izquierda" del que tanto habló cierta prensa. Sus principales colaboradores en estos días acudieron a Washington a recibir instrucciones de los funcionarios del gobierno de George W. Bush, entre ellos un periodista a sueldo del maccartismo con ínfulas de héroe nacionalista, el empleado del diario ultraderechista ABC color, Ricardo Canese. La nominada por el presidente de los EEUU, George Bush, como futura embajadora de ese país ante el Paraguay, Liliana Ayalde, adelantó pondrá en la mesa de negociaciones con el Paraguay la concreción de un tratado de libre comercio entre ambos Estados, algo que difícilmente pueda rechazar el obispo considerando la decisiva intervención de la embajada norteamericana en su favor durante las elecciones paraguayas de abril. Ayalde es una experimenta intervencionista que fue directora de USAID/ Bolivia desde agosto de 1999 donde administró una cartera de alrededor de $US 100 millones por año hasta mediados del 2004, en su mayoría destinados a desestabilizar a Evo Morales. Entonces fue designada Directora de USAID Colombia hasta el 2008, y también dirigió a Usaid en Nicaragua. Ayalde reemplazará a James Cason, que no pasó un solo día sin inmiscuirse en asuntos internos durante su estadía por Paraguay.
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Un célebre episodio de la novela El Gatopardo de Tomasi di Lampedusa narra la llegada a Donnafugata de un funcionario piamontés, Chevalley di Monterzuolo, que ofrece a Don Fabrizio la posibilidad de ser senador del nuevo Reino de Italia..
Sin embargo, el Príncipe rechazará esta oferta, alegando que está demasiado ligado al antiguo régimen, dando como respuesta a Chevalley la famosa frase: «Algo debe cambiar para que todo siga igual». Espejo de la realidad siciliana, esta conocidísima frase simboliza la capacidad de los sicilianos para adaptarse a lo largo de la historia a los distintos pueblos que gobernaron su isla, y por extensión, se aplica a los cambios políticos poco sustanciales. A ninguna región del mundo tan oportuna esta frase como al Paraguay de hoy, una idílica república burguesa gobernada desde la embajada norteamericana.