Chile - Las inconsistencias de la Ministra

Posted by Correo Semanal on sábado, junio 28, 2008








Escrito por Ricardo García
Miércoles, 25 de Junio de 2008 21:21
¿Por qué la Ministra de Educación, que su único objetivo son los estudiantes, continúa sin escucharnos y cada día nos amenaza más y más?
Para responder la pregunta hay que hacer un breve análisis, y los resultados no son alentadores.
Antecedentes
La ministra de Educación, Mónica Jimenez es asistente social titulada de la Universidad Católica: es parte de una Corporación que sostiene tres liceos técnicos, fue rectora de la Universidad Católica de Temuco donde expulsó a 26 estudiantes que habían participado en una toma y como miembro del Consejo Asesor Presidencial para la Educación Superior votó a favor del lucro. Se encuentran muchas otras participaciones en directorios y como sostenedora de colegios, además se relaciona directamente con gerentes de bancos, presidentes de empresas e incluso con el Gerente de la cuestionada empresa SONDA.
Algo que nos preocupa es que cuando asumió como rectora de la Universidad Católica de Temuco lo primero que hizo fue asignarse un sueldo líquido de unos 9 millones y medio de pesos, mientras despedían a otros muchos trabajadores por reducción de presupuesto que no ganaban mas de doscientos mil pesos, sus allegados tendrían sueldos de mas de cuatro millones de pesos. Todo esto se supo una vez que ya había dejado de ser rector.AnálisisAnalizando la pregunta incial encontramos tres posible respuestas.
1. La ministra no nos esucha y nos amenaza porque lo que estamos pidiendo es absurdo y no entendemos nada de la LGE.
2. Efectivamente está convencida que la LGE es excelente y cree a ojos cerrados en el neoliberalismo por sobre el Estado.
3. Sus intereses son demasiado elevados y le conviene de sobremanera que se apruebe la LGE.Si la primera afirmación es correcta entonces los estudiantes somos unos imbéciles que sólo queremos perder clases y peliarnos con los pacos, aprovechar las tomas para carretear y exigir cosas imposibles (según ella) como educacion gratuita o fin a lucro, al menos con fondos fiscales.
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Todo lo anterior claramente es falso porque en esta misma página hacemos análisis profundos a la LGE demostrando sus deficiencias, incentivamos la buena convivencia en las tomas con ley seca y ley lúcida y sabemos que una educación gratuita no es imposible, es poco dinero pensando en lo que maneja el Estado y que sólo se necesita voluntado política.La segunda afirmación, viendo los antecedentes de la ministra es posible hasta cierto punto, y me refiero a que ama el neoliberalismo y cree en José Joaquín Brunner, el supuesto gurú de la Educación Chilena que ni siquiera tiene un título universitario.
Por otro lado es imposible que la ministra crea que la LGE es buena salvo que no sepa leer porque deja muchas cosas de lado y no incluye las demandas básicas de los estudiantes. O sea, si cree que de verdad es buena entonces no tiene idea de nada.Por lo tanto nos va quedando, por descarte, la tercera afirmación, lo que no es nada de alentador puesto que un personero público debe verlar por los intereses colectivos antes que los personales. Además esto nos hace pensar que muchos diuputados y senadores también tienen intereses personales, sobre todo los de derecha, lo que nos llevaría a pensar que se va a aprobar la LGE para beneficio de unos pocos denigrando una vez más al pueblo chileno.Como conclusión nos podemos dar cuenta que la ministra no está capacitada para cumplir su cargo, es sorda y prepotente, le gusta amenazar a los que se supone debe proteger. LA MINISTRA DE EDUCACIÓN NO VELA POR QUIENES RECIBEN LA EDUCACIÓN, y esto es inaceptable, por ello exigimos inmediatamente que deje su cargo para que lo ocupe alguien que si tenga las capacidades necesarias para ocupar un cargo de tanta importancia para el futuro de nuestro país.
Fuente: Canal Experimental de la U. de Chile
http://www.ceuch.org/index.php/analisis-y-documentos/17-analisis/105-las-inconsistencias-de-la-ministra
Reproducido del blog de la Coordinadora de Estudiantes de Quilpue y Villa Alemana