ARGENTINA: Delegacion CTA y Organismos de DD.HH. con los 6 Campesinos Paraguayos

Una destacada comitiva de la Central de Trabajadores de la Argentina y de organismos de derechos humanos visitó ayer a los campesinos detenidos en esta cárcel federal desde hace casi dos años. Injustamente perseguidos, los dirigentes guaraníes recibieron el compromiso de estas organizaciones para agotar todas las instancias de ayuda para lograr el refugio político y que no se extradite a estos luchadores.

La delegación que visitó a los seis campesinos presos en el penal de Marcos Paz estuvo integrada por Víctor de Gennaro, secretario de Relaciones Institucionales; Ricardo Peidro, de Derechos Humanos; Fernando Cardozo, integrante de la Secretaría de Relaciones Internacionales; Carlos Chile, referente del Movimiento Territorial Liberación (MTL-CTA); Nora Cortiñas y Mirta Barabale, de Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora; Graciela Rosemblum, de la Liga Argentina por los Derechos del Hombre; y Ramy Alvarez Fleitas y Teresita Asilveira de la Comisión de Derechos Humanos de los Residentes Paraguayos en Argentina.

Agustín Acosta, Roque Rodríguez, Simeón Bordón, Gustavo Lezcano, Basiliano Cardozo y Arístides Vera –que se encuentran presos a raíz de una oscura maniobra de la justicia paraguaya en connivencia con el Gobierno de ese país– recibieron a la delegación con chipa, maní y tereré.
El encuentro, que se extendió por espacio de tres horas, “sirvió para un diálogo franco y ameno en el que hubo un intercambio de la miradas de la historia paraguaya, como la guerra de la Triple Alianza; también sobre la situación latinoamericana hoy y este nuevo escenario y la injerencia del imperialismo en la región mediante la militarización, el saqueo de los recursos naturales; por último dialogamos acerca de las elecciones presidenciales en Paraguay (que se llevarán a cabo el 20 de abril) y la posibilidad de triunfo de Fernando Lugo, que puede terminar con la hegemonía del Partido Colorado”, contó a ACTA Cardozo.

En esta línea, De Gennaro explicó: “Con Haití se ensañaron porque fue la primera lucha por la independencia en el continente. Y no los perdonan, estigmatizan al pueblo que en algún momento de su historia tuvo afán de libertad e hicieron eso con Paraguay en el siglo XIX, a tal punto que esta guerra de la Triple Infamia, como la llamamos, fue para terminar con el grito de libertad más grande que se vivió en el siglo XIX en América Latina. Ni me quiero imaginar lo que están planeando para Cuba, que es un faro de libertad”.

El dirigente también destacó “la importancia, la centralidad del movimiento campesino en Paraguay, como lo son los pueblos originarios en Bolivia y la clase trabajadora en la Argentina”.
Por su parte, los campesinos encarcelados dieron cuenta de la lucha del movimiento campesino en el Paraguay: “El olvido, la represión, la persecución, el encarcelamiento son temas recurrentes en cada relato”, señaló Cardozo. “Contaron los inicios en la militancia abrazando las ideas de la Teología de la Liberación, la lucha contra la dictadura, la necesidad de construir alternativas para el cambio, la constitución del Partido Patria Libre y su posterior encarcelamiento”. Realizaron una breve reseña del trabajo desarrollado en los distintos asentamientos donde militaban y las persecuciones a las que se vieron sometidos por la tenencia de la tierra.

Un historia de impunidad
Cabe recordar que estos 6 campesinos paraguayos, están presos desde hace un año y 10 meses, acusados del secuestro de Cecilia Cubas, hija del ex presidente de Paraguay, Raúl Cubas Grau. Los secuestros y crímenes que sacuden al Paraguay, se presume que son producto de ajustes de cuentas entre las diferentas facciones del poder en el país. Desde los sectores populares afirman que atribuir este secuestro a los dirigentes campesinos, es sólo un pretexto para acorralar al Partido Patria Libre, al cual pertenecen cinco de los 6 detenidos, y en especial contra todo el movimiento campesino, que desde hace décadas vienen reclamando lo que la tenencia de la tierra que trabajan. “Que nos acusen de cortar rutas, tomar tierras, pero no de algo que no hemos hecho”, dicen los dirigentes presos, que esperan que la Corte Suprema de Justicia Argentina, revoque el fallo sobre la extradición que otorgó el juez Ariel Lijo el 14 de diciembre de 2006, aunque reconoció que no existían pruebas en contra de los seis campesinos.

“Tenemos que dejar claro que el secuestro respondió a un ajuste de cuentas entre la oligarquía mafiosa paraguaya, donde Patria Libre fue el chivo expiatorio, pero al parecer esto no fue suficiente. Necesitaban aparentar la presencia de un grupo guerrillero, que se atribuyó también a miembros de Patria Libre, con algunas organizaciones campesinas, que fueron acusadas en su momento de crear zonas liberadas, excusa que sirvió para atropellar los asentamientos campesinos en todo el país en el 2005", expresa la carta de los 6 dirigentes campesinos dirigida a las organizaciones de derechos humanos.

En su dictamen sostiene que en Paraguay “tendrán un juicio justo, porque es un Estado soberano y democrático. Los 6 campesinos entraron legalmente a la Argentina y el Comité de Elegibilidad para los Refugiados (CEPARE) les otorgó inmediatamente el refugio político temporal. Aún así, fueron detenidos, luego que el Gobierno paraguayo –en manos del Partido Colorado desde hace 60 años– librara captura internacional con código rojo.

El juez de garantías Pedro Mayor Martínez, de Paraguay, rechazó dos veces la prisión preventiva que pedía la fiscalía. El magistrado sostenía que no existían pruebas en contra de los 6 campesinos. Se apeló la medida, y la Cámara de Apelaciones, controlada por el coloradismo concedió el requerimiento y el gobierno paraguayo pidió la extradición, que fue concedida por Lijo. El 20 de febrero de 2007, la solicitud de extradición fue apelada por los abogados de FIDELA y por la Liga Argentina por los Derechos del Hombre. Ese día, organizaciones políticas y sociales marcharon para entregar la apelación a la Corte Suprema.

La solicitud de asiló también cuenta con el apoyo de tres premios nóbeles, Mary Williams, Adolfo Perez Esquivel y Rigoberta Menchú Tum; además del apoyo de la CTA y de personalidades como Osvaldo Bayer, Estela Calloni, el Mopassol, Claudio Lozano, Martín Almada, La Liga Agraria Argentina, entre otras organizaciones. “Si los extraditan al Paraguay, sus vidas corren serio peligro, porque no existen las garantías suficientes ni el juicio justo que pretenden hacernos creer”, coinciden las organizaciones sociales que apoyan esta lucha.

Los integrantes de la delegación se comprometieron a agotar todas las instancias de ayuda para lograr el refugio político y que no se extradite a estos seis luchadores sociales.

Justo ayer, era el cumpleaños de Simeón Bordón. En el festejo, este pidió tres deseos: “¡Libertad, Justicia Social y unidad de la clase trabajadora!”