11 de Sept. 2006: A CONSTRUIR JUNTOS NUESTRO FUTURO

Fuente: "EL TRABAJO" n° 85, períodico de la INICIATIVA POR UN PARTIDO DE TRABAJADORES.
11 DE SEPTIEMBRE DE 2006.

Ante este nuevo aniversario del golpe de estado en que las Fuerzas Armadas derrocaron a sangre y fuego el gobierno del Presidente Allende, no podemos dejar de recordar a los miles de caídos del movimiento de trabajadores y el pueblo, el sufrimiento por la cárcel, la tortura, los familiares y amigos desaparecidos, el exilio... y también la lucha heroica contra la dictadura.

Y, junto con ello, no tenemos que olvidar que el imperialismo y la burguesía, conspiraron y prepararon el Golpe para frenar el ascenso de las luchas sociales, y la amenaza del establecimiento de un régimen socialista y democrático de verdad en Chile. Por eso para nosotros el mayor homenaje es mantenernos firmes junto a los ideales y sueño del Chile socialista que construiremos.

Se puede luchar y se puede ganar.
Un nuevo ciclo de alza de las luchas sociales se ha abierto en el país. Hasta ayer los medios de comunicación nos bombardeaban diciendo que los jóvenes “no están ni ahí”, o que nada se puede hacer porque la gente piensa que: “es lo que hay”. Todos los que escribían y teorizaban sobre la apatía social han tenido que callarse o cambiar su discurso. Nuestros maravillosos Pingüinos demostraron que una nueva generación ha retomado el combate por un mundo mejor. Las movilizaciones de los deudores habitacionales, de los allegados, de los sindicatos en la salud, de la minería están acabando con toda la percepción pesimista. Los resultados de los conflictos muestran que con decisión y buena organización, se puede luchar y se puede ganar.

El gobierno Bachelet.
La Concertación ha cumplido el mismo tiempo en el gobierno que la dictadura militar. En estos años ha consolidado y perfeccionado el modelo capitalista neoliberal. De modo tal que en la práctica para la burguesía han sido los mejores gobiernos de derecha, con capacidad de cooptar a organizaciones y partidos que ayer estuvieron en el campo popular y ahora están al servicio de la gobernabilidad de las instituciones al servicio del capitalismo.
Todos los hechos lo demuestran, el gobierno Bachelet es una administración del capitalismo neoliberal y excluyente en Chile. Si queremos levantar nuevamente un poderoso movimiento con capacidad de cambiar la sociedad tenemos que mantener nuestra total independencia de la Concertación, RN y la UDI.

El déficit democrático.
Las promesas de “democracia participativa”, promesas vacías de la campaña electoral, han quedado en nada.
El problema en Chile no es incluir un par o más diputados del PC en el Congreso, sino la exclusión de las mayorías sociales, que solo podrá resolverse con un movimiento poderoso capaz de provocar la convocatoria a una Asamblea Constituyente que acabe con toda la institucionalidad que viene de la dictadura. La cuestión es acabar con la Constitución de Pinochet, que ahora con un par de tímidas reformas lleva la firma de Lagos. El parlamento social y político, convocado por una CUT que hoy ve bondades en la UDI, por el PC que hoy mira hacia RN y por varios diputados de la Concertación que han demostrado más de una vez que el sistema binominal les acomoda muy bien, sólo nos hace pensar en que se busca un objetivo desmovilizador y un nuevo engañó al pueblo y sus luchas.

¿Cuales son las tareas que tenemos ante nosotros?
Llamamos a la unidad, hay que terminar con la división entre miles de pequeños colectivos autorreferentes, que viven mirándose a si mismos, y avanzar en la unidad para la construcción de un instrumento político efectivo al servicio de los trabajadores, los jóvenes y sus familias. Les convocamos a construir juntos nuestro futuro.