Brasil: La farsa del impeachment solo sirve al gran capital.

Posted by Cunche Campos on jueves, septiembre 01, 2016



La farsa del impeachment solo sirve al gran capital.

Fuera Temer! Elecciones generales ya!
Huelga general en defensa de los trabajadores!

El salón alfombrado del plenario del senado federal fue una vez mas palco de una gran infamia.

La votación definitiva del impeachment de Dilma Rousseff, en las condiciones espurias en que se dio representa un peligroso precedente que coloca en serio riesgo los derechos democráticos del pueblo brasilero.

Los engaños , fraudes y maniobras políticas, jurídicas y mediáticas utilizadas para hacer valer el  inpeachment nos dan una dimensión del nivel de putrefacción del sistema político brasilero.

Nada se puede esperar de esos viejos y notorios corruptos de traje y corbata que no demuestran ningún pudor en hacer y deshacer si eso sirve a los intereses de sus señores, el gran capital.

Si esa elite política reaccionaria fue capaz de hacer eso contra una presidenta que no represento ninguna seria amenaza al injusto orden establecido, imagínense de lo que serán capaces contra fuerzas políticas de izquierda y de la clase trabajadora que de verdad representan cambios estructurales y radicales en el país.

La decisión del senado es parte importante del proyecto que profundiza los ataques y contra reformas contra los trabajadores en favor del gran capital en medio de una de las mas graves crisis de la historia del país.

La decisión del Senado reitera una contradicción antigua: nuestra democracia no es verdadera, ella mantiene las apariencias apenas cuando eso es conveniente a los dueños del capital.

Para garantizar los privilegios de los de arriba, ellos precisan pisotear los derechos de los de abajo ese es el vergonzoso papel destinado a la deprimente figura de Michel Temer.

El gobierno de Temer, ahora ungido por la decisión del Senado, no ahorrara esfuerzos en su cruzada contra los derechos sociales y laborales. Para cumplir su papel no vacilara en el ataque a los derechos democráticos, incluyendo el derecho de organización y manifestación.

El nuevo impulso de este gobierno ilegitimo contra los trabajadores solo podrá ser contenido por las lucha unificada de la clase trabajadora y del pueblo.

 Cuando ya no tenia mas como revertir la posición pro inpeachment de la mayoria de los senadores, Dilma Rousseff critico parte de las contra reformas y ataques de Temer en su ultimo descurso. Pero, gran parte de esos ataques tuvo inicio en su propia gestion y ninguna autocritica de ella o del PT fue hecha.

Desacreditada y sin apoyo popular despues de contrariar su discurso de campaña y adoptar el programa de su adversario, Aécio Neves, la presidenta Dilma Rousseff ya no tenia fuerza politica para llevar adelante el proyecto de cortes, privatizaciones y contra reformas que intento implementar. Eso llevo al nucleo principal de la clse capitalista a apostar por un nuevo presidente que no se presentara a reeleción y no depende de la aprobación popular.

Las grandes mobilizaciones contra Temer desde la abertura del proceso de inpeachment, en aquella fatidica sesión de la Camara de Diputados presidida por el corrupto Eduardo Cunha, dejaron claro que hay disposición de lucha y resistencia por parte de los trabajadores y del pueblo. Pero, esas movilizaciones fueron directa o indirectamente saboteadas o cohibidas por la dirección de PT y sus aliados directos.

Desde el principio, Lula y el PT apostaron a una repactación con las fuerzas políticas en el congreso y con el gran capital. La vocación para la conciliación de clases que es, en el limite, la causa fundamental del fracaso del Lulismo, esta en su código genético. No aprendieron y no aprenderán nada de su derrota.

El golpe parlamentario denunciado por Dilma en la tribuna del Senado no fue confrontado como debería por los dirigentes del PT.

La idea de que la lucha contra el impeachment pudiese implicar la vuelta de Dilma, por si sola ya impedía que esas movilizaciones tuviesen fuerza suficiente para derrotar las maniobras del gobierno interino. En ese contexto, era fundamental la defensa de una politica en que el pueblo debería decidir sobre quien debe gobernar, o sea, la convocación de nuevas elecciones con reglas realmente democráticas.

Cuando la propia Dilma, despues de mucha resistencia, acaba por aceptar la idea de nuevas elecciones ( creyendo que eso revertiría el voto de algunos senadores), su propio partido, el PT, rechazó la idea. La direccion petista y el propio Lula se mostraron acomodados a la idea de que Temer pudiera gobernar hasta el 2018, desgastandose y creando condiciones para que Lula pudiese volver de la mano del pueblo.

Terrible ilusión! Si se consigue consolidar y gobernar hasta el 2018, Temer va a promover un historico retroceso para la clase trabajadora brasilera. Y la ofensiva contra quien se levante contra eso no sera despreciable. El propio Lula, por mas que apueste por la conciliación, está en la mira de Lava Jato y dificilmente llegara intacto al 2018.

Ademas de eso, existe una fuerte dosis de cinismo en esa politica de la direccion del PT. Las propias medidas duras que Temer venga a adptar no dejan de ser vistas por dirigentes del partido como un mal necesario. En ese sentido creen que es preferible que Temer promueva las contra reformas y cargue con eso. Eso libra al PT de eso y permite que el partido vuelva a usar una retorica critica, de izquierda, como acostumbra hacer en época de elecciones.
No se puede tener cualquier ilusión en el papel de la dirección del PT, tanto en lo que se refiere a Lula contra Temer, como en relación a una alternativa de izquierda en el país.

Es preciso que se construya una amplia unidad para luchar contra Temer y sus ataques. Esa unidad en la lucha debe crear las condiciones para una huelga general contra los ataques de Temer. Pero, es preciso que se construya en ese proceso una alternativa politica de izquierda y socialista en relación al propio PT y sus aliados directos. Es preciso que se construya un frente de izquierda socialista que sea integrado por el PSOL, PSTU, PCB, organizaciones socialista no legalizadas y tambien movimientos sociales clasistas y combativos como el MTST, la CSP-Conlutas, etc.

Esas son las tareas de la izquierda socialista consecuente y de todos los militantes del movimiento sindical y popular, de la juventud, de las mujeres, LGBTs y todos los oprimidos. No hay tiempo que perder!

Fuera Temer! Elecciones generales ya! Huelga general en defensa de los derechos!

Comité Ejecutivo de LSR.