Desde Bolivia: POLÍTICOS CHILENOS

Posted by Correo Semanal on lunes, octubre 20, 2014

 
POR: GASTÓN CORNEJO BASCOPÉ PRESIDENTE DE LA SOCIEDAD DE GEOGRAFÍA E HISTORIA DE COCHABAMBA.
Llegaron a La Paz representantes de los partidos de la izquierda chilena para departir amistad y comulgar ideas con los movimientos sociales bolivianos.

Los Partidos y Movimientos de Chile suscribieron una valiente y fraternal declaración: “Saludamos al pueblo boliviano y en sesión plenaria afirmamos que los pueblos de Chile yBolivia son pueblos hermanos. Que nuestras luchas por la autodeterminación, contra la explotación, la pobreza, la discriminación y la apropiación de nuestra tierra y medio ambiente por parte de los grandes capitales transnacionales, es común y forma parte del patrimonio de lucha de los movimientos sociales. Que en ambos países luchamos por construir sociedades justas e igualitarias basadas en nuestras soberanías como pueblos y en la construcción de democracias verdaderamente participativas y directas. Pensamos que el diálogo entre nuestros pueblos y también entre los gobiernos debe ser retomado en lo inmediato por sobre las vías jurídicas. No es recusando o negando el diálogo en torno a la demanda marítima de Bolivia que se podrá avanzar. En consecuencia, no compartimos la decisión del Gobierno de Chile de recusar la competencia del Tribunal Internacional de la Haya frente a la demanda de negociación presentada por el Gobierno de Bolivia.

Creemos que se debe iniciar a la brevedad en un diálogo y negociación bilateral directa e invitar oficialmente luego al Perú. Es la hora de la integración de nuestros pueblos hacia la construcción de la Patria Grande. Los pueblos de Chile y Bolivia tenemos la responsabilidad de avanzar juntos y las fuerzas sociales, populares y de izquierda de Chile y Boliviadebemos asumir el desafío conjuntamente”. Firman: Octavio González y Joaquín Arduengo, Presidente y miembro del Partido Humanista. Esteban Silva, Coordinador del Movimiento del Socialismo Allendista, Javiera Rivas, Roberto Striling, Álvaro Fernández, del Partido Igualdad.

Personalmente conozco a los personeros del Partido Humanista chileno, entre ellos distingo fraternalmente a Tomás Hirsch, quien fue candidato a la presidencia del país hermano. Sé de la ideología pacifista y constructiva que asume el Humanismo de Mario Rodríguez Cobos SILO, su creador. Conozco y aprecio entrañablemente al Coordinador del Partido Socialista de Salvador Allende, el insigne político Esteban Silva, quien lucha constantemente por la integración americana y la justicia social también al distinguido Jorge Arrate excandidato a la Presidencia. Sé, que de haber sido invitado el Senador Alejandro Navarro y el diputado Marco Enríquez-Ominami, hubieran firmado con gusto el manifiesto. Solo deploro la ausencia de algún representante del Partido Comunista chileno, el gran partido de Luis Emilio Recabarren, Ricardo Fonseca, Volodia Teitelboim, Pablo Neruda, Luis Corvalán, los Insulza, Víctor Jara, Elías Lafferte, Alejandro Lipschutz, Gladys Marín. La antigua y selecta agrupación política con cuya ideología comulgamos en la perspectiva de una transformación social y cultural en pos de un mundo nuevo y la integración americana para la cual es absolutamente inadmisible el enclaustramiento boliviano. Ninguna voz ahora que es un partido cogobernante. No se escuchó de sus actuales miembros ningún cuestionamiento a la decisión de objetar al Tribunal de La Haya. También sé que al menos un centenar de personalidades de Chile envió una carta a la presidenta Michel Bachelet pidiéndole dialogar con Bolivia

Respondo al Manifiesto y al gesto con la gratitud debida, ya que guardo reconocimiento hacia el pueblo de Chile porque en su seno universitario gané mi cultura profesional y en sus valores profundos acrisolé el humanismo y la dignidad de ser humano en la respetabilidad de persona. 

Valoro el manifiesto, grato para los bolivianos que soñamos con la posibilidad cierta y realizable de un encuentro fraternal entre nuestros pueblos que tienen un desafío histórico de concluir el enclaustramiento de Bolivia.