Gaza - Los límites de la fuerza militar israelí
Sergio Yahni *
La resistencia palestina logró sorprender a los analistas militares
israelíes y atrapar al ejercito sin suficiente preparación logística. Israel se
vio obligado a llamar a 16.000 soldados de reserva adicionales y abrir un
arsenal estadounidense de emergencia para abastecerse de municiones.
Un funcionario de la defensa de los EE.UU., que hablo con la prensa israelí
bajo condición de anonimato, reconoció este jueves que los Estados Unidos
habían permitido a Israel utilizar uno de los arsenales de armas
norteamericanos en Israel para reabastecerse de granadas y proyectiles de
mortero.
De acuerdo a lo dicho por este funcionario, el Pentágono está procesando
otras peticiones israelíes de abastecimiento para el futuro. El funcionario no
ofreció detalles sobre las cantidades o los gastos de municiones ya
suministradas o solicitadas.
Estas declaraciones se hicieron públicas el mismo día que el gabinete de israelí
ordenaba al ejército “golpear con fuerza a Hamas y las otras organizaciones
terroristas en Gaza,” y el ejército anunciaba que llamaría a 16.000 soldados
adicionales al servicio de reserva .
Estos soldados se sumarían a los 70.000 reservistas ya activos lo
representa un total de unos 86.000 reservistas en servicio. Podemos suponer que
Israel mantiene una cantidad similar o mayor de soldados regulares en la Franja
de Gaza, lo que significaría que las fuerzas israelíes combatiendo llegan a
sumar casi el 10% de la población palestina en Gaza.
Estos crecientes esfuerzos de determinar con éxito la batalla de Gaza,
contradicen los esfuerzos de la Autoridad Palestina de conseguir rápidamente un
acuerdo de cese de fuego. El jueves por la mañana llego al Cairo una delegación
palestina, que incluye representantes de Hamas y de la Jihad Islámica, con el
objetivo de discutir un potencial acuerdo con Israel.
Dadas las relaciones de fuerza asimétricas a favor de Israel, no sería
extraño que esta se impusiera, pero cuanto más se pospone el cese de fuego la
situación en Cisjordania se va transformando gradualmente en insostenible. De
aquí la urgencia del Presidente Palestino.
Las movilizaciones masivas en Jerusalén y Cisjordania son alimentadas por
la actuación israelí en Gaza y por lo tanto no disminuyen. Al mismo tiempo
mientras que en Jerusalén y el sur de Cisjordania la resistencia popular se
caracteriza por enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas israelíes, al
norte de Cisjordania ya se ven ya incipientes indicios de actividad
guerrillera.
En ambos casos la autoridad del gobierno de Abbas se desgasta gradualmente
mientras la policía palestina reprime a los manifestantes.
Pero Israel considera que Hamas ha sufrido daños sin precedentes y el
Primer Ministro Benjamín Netanyahu declaro que no ha llegado el momento de un
cese de fuego, y que este no llegaría sin que que el ejército destruya todos
los túneles en Gaza.
Pero, también el Primer Ministro israelí reconoce que las perspectivas de
éxito son limitadas.
“Ya lo dije al comienzo de la campaña”, declaraba Netanyahu el jueves, “no
hay garantías de cien por ciento de éxito, al igual que la Cúpula de Hierro no
proporciona una respuesta completa”.
Ya si Israel consiguiera los objetivos tácticos que ha declarado, la
resistencia habría conseguido una victoria de valor estratégico, resistiendo en
Gaza, movilizando a la población palestina de Jerusalén Oriental y Cisjordania
y creando las condiciones para un levantamiento popular.
* Codirector del Centro de Información Alternativa, judeo-argentino, es
militante por la paz, reside en Israel.
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