Chile - El doble castigo del ‘Mamo’ Contreras
El olvido de nuestros muertos o ya nada nos sorprende
por Javier Karmy
"Aparentemente al país se le olvidó que aún hay familiares de personas que fueron desaparecidas y detenidas desaparecidas, torturadas, degolladas, y lo que es peor, aún andan por ahí quienes saben qué pasó con todos nuestros chilenos y chilenas, pero que 18 años después del régimen militar no hay noticia alguna. ¿Recuerdan cuando el 28 de enero de 2005 al 'Mamo' le escupieron y le tiraron de todo, incluso melones y huevos mientras Carabineros lo subía al móvil de Gendarmería para trasladarlo al penal Cordillera de Peñalolén, donde cumpliría su condena de 12 años y un día de presidio por su responsabilidad en el secuestro y desaparición del sastre Miguel Ángel Sandoval en 1975?"
Justo días después de la conmemoración del centenario del natalicio del ex Presidente Salvador Allende, el 30 de junio el ex director de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), Manuel ‘Mamo’ Contreras, recibió la condena de doble cadena perpetua por el doble homicidio cometido contra el otrora comandante en jefe del Ejército Carlos Prats y su esposa Sofía Cuthbert, crimen realizado hace 34 años en Argentina. La condena, dictada por el ministro en visita Alejandro Solís, quien el 2004 interrogó para este mismo caso en calidad de testigo al ahora extinto general retirado Augusto Pinochet, le sumó además una sentencia de veinte años de presidio por asociación ilícita. Aunque las condenas deben ser ratificadas por la Corte de Apelaciones, el Mamo ya suma 289 años de prisión.
El juez Alejandro Solís también sentenció al brigadier (r) Pedro Espinoza a veinte años en prisión por cada asesinato, y otros veinte años por su rol en esta asociación ilícita.
Además, dictó sentencias menores contra distintos agentes del Estado que también actuaron para eliminar a Carlos Prats, quien fuera el comandante en jefe del Ejército hasta 1973, año en que asumió funciones ministeriales en el gobierno de la Unidad Popular, momento en que fue subrogado por el general de división Augusto Pinochet Ugarte.
Carlos Prats renunció a la comandancia del Ejército el 22 de agosto de 1973, y luego del golpe se fue a Buenos Aires. El 30 de septiembre de 1974 una bomba le desparramó su vida y la de su esposa, en lo que fue un “acto de terrorismo de la mayor magnitud en territorio extranjero”, dijo ayer la abogada de la familia Prats, Cecilia Pereira.
En tanto, el presidente del Partido Socialista y Senador por la X Región Sur, Camilo Escalona, afirmó que el fallo judicial da cuenta de que Pinochet estaba detrás del atentado, ya que "no es posible haber organizado una operación de esta naturaleza en Argentina sin el respaldo del Estado chileno", argumentó.
“El país ya conoce la verdad”
Ayer, la noticia fue conocida por el mundo entero. Pese a que Cecilia Prats, una de las hijas del asesinado matrimonio, manifestó un poco agotada que “el país ya conoce la verdad, estamos tranquilas después de todos estos años el Ejército también tiene claridad de los participantes, son siete militares que en servicio activo participaron en la muerte de un comandante en jefe y la justicia ya se vio”, concluyó emocionada.
Sin embargo, la memoria de quienes murieron bajo la dictadura militar, está quedando bajo la arcilla de las noticias fugaces y corrientes. La memoria en la prensa ya no alcanza a perdurar un día.
Un ejemplo de lo anterior, es que en los medios chilenos on-line más importantes como Emol, La Tercera y Terra, la noticia pasó muy rápido y dejó de existir en unas horas (aún cuando en Terra sigue vivo el recuerdo de Allende). En tanto, en La Nación y el portal de radio Cooperativa, la puesta en marcha de la Reforma Provisional marcó la pauta de la tarde, dejando en segundo lugar la doble sentencia al personaje más oscuro de la dictadura militar de Pinochet. Incluso, el canal privado CHV –que hasta la dictadura era de la Universidad de Chile y hoy es del millonario precandidato presidencial de Renovación Nacional, Sebastián Piñera-, en voz de la periodista Carolina Garrido, narró la noticia al medio día haciendo un contacto en directo desde Tribunales, desde donde explicó las condenas. Al terminar el despacho, explicó que “el más perjudicado… por así decirlo, es entonces Manuel Contreras quien repetimos, fue condenado a una doble cadena perpetua”, concluyó en vivo.
En contraposición, aún a media noche, medios internacionales como el español El Mundo, el argentino La nación, o el inglés BBC mantenían la noticia fresca. De hecho, para este último, la doble cadena perpetua al ‘Mamo’ siguió siendo el gran titular, en desmedro de otras noticias de América Latina y del mundo.
Más triste que lo anterior, es encontrar al día siguiente en la prensa de papel, el ninguneo de esta noticia. La Tercera sencillamente no la puso en portada y estampó una foto de los triunfadores de la Eurocopa. El Mercurio puso una foto del accidente de Evo Morales al aterrizar en Tucumán, Argentina, y más abajito, en un recuadro al lado del tercer titular, ‘Dictan condenas en el caso Prats’. Por su parte, La Nación, puso de portada una gran fotografía del momento en que la familia Prats recibió la noticia, pero tituló con el trabajo que ha realizado Contraloría en las irregularidades de Recoleta.
Aparentemente al país se le olvidó que aún hay familiares de personas que fueron desaparecidas y detenidas desaparecidas, torturadas, degolladas, y lo que es peor, aún andan por ahí quienes saben qué pasó con todos nuestros chilenos y chilenas, pero que 18 años después del régimen militar no hay noticia alguna. ¿Recuerdan cuando el 28 de enero de 2005 al ‘Mamo’ le escupieron y le tiraron de todo, incluso melones y huevos mientras Carabineros lo subía al móvil de Gendarmería para trasladarlo al penal Cordillera de Peñalolén, donde cumpliría su condena de 12 años y un día de presidio por su responsabilidad en el secuestro y desaparición del sastre Miguel Ángel Sandoval en 1975?
Hoy, el ministro de Justicia, Carlos Maldonado, destacó que los tribunales están esclareciendo los casos de violaciones a los derechos humanos “para ir avanzando en la verdad y la justicia”, y reconoció que no ha sido fácil investigar, “primero porque la dictadura lo impedía y luego porque no siempre se cuenta con la información y colaboración necesarias”.
Pero lo que llama aún más la atención, es que la Presidenta Michelle Bachelet hoy guardó silencio, aún cuando es hija del torturado general Alberto Bachelet, férreo opositor al régimen militar, quien muriera en marzo de 1974 en la Cárcel Pública de Santiago luego de sufrir un ataque al miocardio producto de las torturas que no logró soportar tras haber sido detenido por tercera y última vez el 18 de septiembre de 1973 con la acusación de traicionar a la Patria.
Silencio de hoy de la Presidenta de Chile, que el 10 de octubre de 2007, era inauguración de la Escuela General Alberto Bachelet, en memoria, no solo de su padre, sino de quienes dejaron la vida por “la paz y la libertad por sobre todas las cosas”, palabras del torturado uniformado que escribió en la pared de la cárcel pública antes de morir.
El olvido es la muerte, y la peor muerte es el olvido. El ninguneo de la mayoría de los medios de comunicación a esta noticia, el bajarle el perfil a la doble cadena perpetua al personaje más temerario de la dictadura que aún vive, el hacer como que no ha pasado nada sin considerar los 18 años de búsqueda de los fierros amarrados a nuestros cuerpos tirados en el mar, es lo más doloroso que una democracia incompleta puede hacer. Esto es negligencia, es lo más bajo que un país puede dejar que pase sin sorprenderse, considerando que ya no solo las Fuerzas Armadas y el Gobierno reprime a estudiantes, mapuches y trabajadores, sino que también olvida y nos quieren olvidar, dejándonos sin ayer. Esto es el olvido de nuestros muertos o ya nada nos sorprende.
por Javier Karmy
"Aparentemente al país se le olvidó que aún hay familiares de personas que fueron desaparecidas y detenidas desaparecidas, torturadas, degolladas, y lo que es peor, aún andan por ahí quienes saben qué pasó con todos nuestros chilenos y chilenas, pero que 18 años después del régimen militar no hay noticia alguna. ¿Recuerdan cuando el 28 de enero de 2005 al 'Mamo' le escupieron y le tiraron de todo, incluso melones y huevos mientras Carabineros lo subía al móvil de Gendarmería para trasladarlo al penal Cordillera de Peñalolén, donde cumpliría su condena de 12 años y un día de presidio por su responsabilidad en el secuestro y desaparición del sastre Miguel Ángel Sandoval en 1975?"
Justo días después de la conmemoración del centenario del natalicio del ex Presidente Salvador Allende, el 30 de junio el ex director de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), Manuel ‘Mamo’ Contreras, recibió la condena de doble cadena perpetua por el doble homicidio cometido contra el otrora comandante en jefe del Ejército Carlos Prats y su esposa Sofía Cuthbert, crimen realizado hace 34 años en Argentina. La condena, dictada por el ministro en visita Alejandro Solís, quien el 2004 interrogó para este mismo caso en calidad de testigo al ahora extinto general retirado Augusto Pinochet, le sumó además una sentencia de veinte años de presidio por asociación ilícita. Aunque las condenas deben ser ratificadas por la Corte de Apelaciones, el Mamo ya suma 289 años de prisión.
El juez Alejandro Solís también sentenció al brigadier (r) Pedro Espinoza a veinte años en prisión por cada asesinato, y otros veinte años por su rol en esta asociación ilícita.
Además, dictó sentencias menores contra distintos agentes del Estado que también actuaron para eliminar a Carlos Prats, quien fuera el comandante en jefe del Ejército hasta 1973, año en que asumió funciones ministeriales en el gobierno de la Unidad Popular, momento en que fue subrogado por el general de división Augusto Pinochet Ugarte.
Carlos Prats renunció a la comandancia del Ejército el 22 de agosto de 1973, y luego del golpe se fue a Buenos Aires. El 30 de septiembre de 1974 una bomba le desparramó su vida y la de su esposa, en lo que fue un “acto de terrorismo de la mayor magnitud en territorio extranjero”, dijo ayer la abogada de la familia Prats, Cecilia Pereira.
En tanto, el presidente del Partido Socialista y Senador por la X Región Sur, Camilo Escalona, afirmó que el fallo judicial da cuenta de que Pinochet estaba detrás del atentado, ya que "no es posible haber organizado una operación de esta naturaleza en Argentina sin el respaldo del Estado chileno", argumentó.
“El país ya conoce la verdad”
Ayer, la noticia fue conocida por el mundo entero. Pese a que Cecilia Prats, una de las hijas del asesinado matrimonio, manifestó un poco agotada que “el país ya conoce la verdad, estamos tranquilas después de todos estos años el Ejército también tiene claridad de los participantes, son siete militares que en servicio activo participaron en la muerte de un comandante en jefe y la justicia ya se vio”, concluyó emocionada.
Sin embargo, la memoria de quienes murieron bajo la dictadura militar, está quedando bajo la arcilla de las noticias fugaces y corrientes. La memoria en la prensa ya no alcanza a perdurar un día.
Un ejemplo de lo anterior, es que en los medios chilenos on-line más importantes como Emol, La Tercera y Terra, la noticia pasó muy rápido y dejó de existir en unas horas (aún cuando en Terra sigue vivo el recuerdo de Allende). En tanto, en La Nación y el portal de radio Cooperativa, la puesta en marcha de la Reforma Provisional marcó la pauta de la tarde, dejando en segundo lugar la doble sentencia al personaje más oscuro de la dictadura militar de Pinochet. Incluso, el canal privado CHV –que hasta la dictadura era de la Universidad de Chile y hoy es del millonario precandidato presidencial de Renovación Nacional, Sebastián Piñera-, en voz de la periodista Carolina Garrido, narró la noticia al medio día haciendo un contacto en directo desde Tribunales, desde donde explicó las condenas. Al terminar el despacho, explicó que “el más perjudicado… por así decirlo, es entonces Manuel Contreras quien repetimos, fue condenado a una doble cadena perpetua”, concluyó en vivo.
En contraposición, aún a media noche, medios internacionales como el español El Mundo, el argentino La nación, o el inglés BBC mantenían la noticia fresca. De hecho, para este último, la doble cadena perpetua al ‘Mamo’ siguió siendo el gran titular, en desmedro de otras noticias de América Latina y del mundo.
Más triste que lo anterior, es encontrar al día siguiente en la prensa de papel, el ninguneo de esta noticia. La Tercera sencillamente no la puso en portada y estampó una foto de los triunfadores de la Eurocopa. El Mercurio puso una foto del accidente de Evo Morales al aterrizar en Tucumán, Argentina, y más abajito, en un recuadro al lado del tercer titular, ‘Dictan condenas en el caso Prats’. Por su parte, La Nación, puso de portada una gran fotografía del momento en que la familia Prats recibió la noticia, pero tituló con el trabajo que ha realizado Contraloría en las irregularidades de Recoleta.
Aparentemente al país se le olvidó que aún hay familiares de personas que fueron desaparecidas y detenidas desaparecidas, torturadas, degolladas, y lo que es peor, aún andan por ahí quienes saben qué pasó con todos nuestros chilenos y chilenas, pero que 18 años después del régimen militar no hay noticia alguna. ¿Recuerdan cuando el 28 de enero de 2005 al ‘Mamo’ le escupieron y le tiraron de todo, incluso melones y huevos mientras Carabineros lo subía al móvil de Gendarmería para trasladarlo al penal Cordillera de Peñalolén, donde cumpliría su condena de 12 años y un día de presidio por su responsabilidad en el secuestro y desaparición del sastre Miguel Ángel Sandoval en 1975?
Hoy, el ministro de Justicia, Carlos Maldonado, destacó que los tribunales están esclareciendo los casos de violaciones a los derechos humanos “para ir avanzando en la verdad y la justicia”, y reconoció que no ha sido fácil investigar, “primero porque la dictadura lo impedía y luego porque no siempre se cuenta con la información y colaboración necesarias”.
Pero lo que llama aún más la atención, es que la Presidenta Michelle Bachelet hoy guardó silencio, aún cuando es hija del torturado general Alberto Bachelet, férreo opositor al régimen militar, quien muriera en marzo de 1974 en la Cárcel Pública de Santiago luego de sufrir un ataque al miocardio producto de las torturas que no logró soportar tras haber sido detenido por tercera y última vez el 18 de septiembre de 1973 con la acusación de traicionar a la Patria.
Silencio de hoy de la Presidenta de Chile, que el 10 de octubre de 2007, era inauguración de la Escuela General Alberto Bachelet, en memoria, no solo de su padre, sino de quienes dejaron la vida por “la paz y la libertad por sobre todas las cosas”, palabras del torturado uniformado que escribió en la pared de la cárcel pública antes de morir.
El olvido es la muerte, y la peor muerte es el olvido. El ninguneo de la mayoría de los medios de comunicación a esta noticia, el bajarle el perfil a la doble cadena perpetua al personaje más temerario de la dictadura que aún vive, el hacer como que no ha pasado nada sin considerar los 18 años de búsqueda de los fierros amarrados a nuestros cuerpos tirados en el mar, es lo más doloroso que una democracia incompleta puede hacer. Esto es negligencia, es lo más bajo que un país puede dejar que pase sin sorprenderse, considerando que ya no solo las Fuerzas Armadas y el Gobierno reprime a estudiantes, mapuches y trabajadores, sino que también olvida y nos quieren olvidar, dejándonos sin ayer. Esto es el olvido de nuestros muertos o ya nada nos sorprende.
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Los otros condenados
A Raúl Iturriaga Neumann el dictamen es de quince años de presidio por cada homicidio y de 541 por asociación ilícita. En tanto, para José Zara, Juan Morales Salgado y Christoph Willike la sentencia alcanza a diez años de presidio por cada crimen y de 541 días por la asociación ilícita.
En el caso de Jorge Iturriaga Neumann cinco años y un día por cada homicidio y a su vez Mariana Callejas -en su rol de autora material del crimen- recibió una pena de diez años por cada homicidio
Finalmente el suboficial (r) Reginaldo Valdés enfrentará dos penas de 541 días por su rol en los dos asesinatos.
A Raúl Iturriaga Neumann el dictamen es de quince años de presidio por cada homicidio y de 541 por asociación ilícita. En tanto, para José Zara, Juan Morales Salgado y Christoph Willike la sentencia alcanza a diez años de presidio por cada crimen y de 541 días por la asociación ilícita.
En el caso de Jorge Iturriaga Neumann cinco años y un día por cada homicidio y a su vez Mariana Callejas -en su rol de autora material del crimen- recibió una pena de diez años por cada homicidio
Finalmente el suboficial (r) Reginaldo Valdés enfrentará dos penas de 541 días por su rol en los dos asesinatos.
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